Freijo & Asociados

Carta abierta a la pasionaria

Estimada Dolores(1):

Permítame Usted molestarla con estas líneas de una situación que acontece en un sitio lejos de su Vizcaya natal y con vivencias tan diferentes a las que le tocó vivir.

Resulta que en este bendito país no están aquellos sanguinarios falangistas y –supuestamente- somos todos republicanos, pero últimamente vienen pasando algunas cosas que me hacen dudar de la condición de republicanos de algunos dirigentes políticos, y –precisamente- ese es el motivo de esta carta.

Luego de una década de fanfarria de pizza y champagne aparecía una luz en el fondo del túnel, y la duda era si esa era la salida o era la luz que se ve cuando la parca nos llama.

Pero bueno, supuestamente se "descubrió" que los cabecillas de todo el semi-saqueo eran un oscuro y corto funcionario y una ingeniera supuestamente venida a millonaria con supuestos amantes millonarios, padres supuestamente millonario y peluqueros supuestamente millonarios.

Se sabe que las normas deben penar de acuerdo al valor que un bien tiene para esa sociedad (una vida mas que una billetera, etc) y entonces nos dijimos: ¿qué puede ser peor que robarle al pueblo?. Pero ¿sabe que? El enriquecimiento ilícito no es considerado un delito grave y –por lo tanto- excarcelable. Entonces quedo una pregunta flotando: ¿será que nuestros dirigentes hicieron al enriquecimiento ilícito excarcelable porque no les gusta escupir para arriba?.

No, seguro que no, será solo un mal pensamiento. Pero saltó la perdiz ¿vió? y las conjeturas se tornaron cada vez más imposible de entender, y quisiera que me entienda bien lo de las conjeturas porque nada se sabe o si algo se sabe es que nada se va a saber, pero bueno, le mando algunas para que Usted tache aquellas que le parezcan posibles:

  • que senadores de la oposición hayan recibido coimas por parte del ejecutivo
  • que el vicepresidente esté armado esto pensando en manchar al presidente y una posible renuncia que lo lleve a la primera magistratura.
  • que se cobró la coima en efectivo y en el propio senado un día después de la votación.
  • que el encargado haya sido un senador de la oposición.
  • que van a aparecer un par de diputados que supuestamente aportaron el dinero, y que con su renuncia no se va a seguir investigando al ejecutivo.
  • que uno de los senadores mas comprometidos es quien debe controlar a la Auditoría General de la Nación donde trabaja la hija del Juez que investiga.
  • que el juez que debe investigar esas coimas (léase cohecho) tiene 6 pedidos de juicio político por distintas causas y entre ellas la de enriquecimiento ilícito o de aumento desmedido de su patrimonio y que quienes deben decidir sobre su futuro son los mismos senadores sobre los que debe investigar por este delito.

No pretendemos –ni pensamos siquiera- algún otro tipo de gobierno que no sea el representativo, republicano y federal, o –como dicen los de U.S.A.- un gobierno por y para el pueblo, pero eso no nos debe quitar de la cabeza que mientras existan chicos con hambre, abuelos con hambre, maestros con hambre, hospitales con hambre, policías con hambre, pueblo con hambre, existan unos señores que intentes repartir los bienes de la nación como posible botín de guerra.

Por eso, Doña Dolores, teniendo en cuenta que no queremos ni podemos permitirnos vivir de rodillas, es que le escribo estas líneas, porque comenzamos a entender que muchos que creíamos de nuestro lado no lo están y uno se va sintiendo huérfano de respeto, despojado de futuro y desolado de esperanza.

Reitero, aquellos falangistas ya no están, pero sigo pensando que algunos de nuestros representantes "no pasarán".

Jorge Eduardo Freijo

 


(1): Dolores Ibárruri Gómez, (1895-1989), dirigente española conocida popularmente como "Pasionaria". Nació en el seno de una familia de mineros en Gallarta (Vizcaya). En 1936 fue elegida diputada por Asturias. Durante la Guerra Civil recorrió el frente republicano con las consignas "no pasarán" y "antes morir de pie que vivir de rodillas". Desde 1939 vivió exiliada. Regresó a España en 1977 y murió en 1989 en Madrid.